En otro día que se fue de control por la alta inflación mundial, los mercados financieros globales sufrieron ayer un martes 13 sangriento con foco en el peor día del año en Wall Street, y Argentina también tuvo resultados negativos pero sufrió mucho menos que el resto.
Las variables venían circulando en general en verde en todas partes hasta que EE.UU. dio a conocer su inflación de agosto. La secretaria del Tesoro norteamericana Janet Yellen había anticipado que la variación venía con muy leve deflación, pero al difundirse los índices se demostró que la suba de precios sigue muy viva y todo lo que estaba en verde pasó a un rojo profundo.
De esperarse para agosto una deflación del 0,1% o el 0,2%, se terminó confirmando que hubo una inflación del 0,1%, con 8,3% en los últimos doce meses, pero la peor de todas las noticias es que la inflación núcleo (denominada “core” en EE.UU.) fue de 0,6% mensual, cuando todos los especialistas esperaban menos para ese indicador.