Los ocho rugbiers acusados del crimen de Fernando Báez Sosa fueron trasladados esta mañana a los Tribunales de Dolores, donde a partir de hoy comenzarán a ser juzgados por el asesinato cometido a la salida del boliche Le Brique boliche en la localidad balnearia de Villa Gesell el 18 de enero de 2020.
Una veintena de agentes del SPB y de la Dirección de Operaciones Especiales (DOE) custodió el móvil penitenciario que salió cerca de las 7.45 del penal de Dolores, ubicado en Riobamba al 200, para cubrir las 10 cuadras de distancia con la sede de tribunales, donde a partir de las 9 se iniciará el debate.
Minutos antes de las 8 los móviles ingresaron al estacionamiento del lugar, luego de pasar un importante vallado policial ubicado sobre el frente de los tribunales.
En tanto, María Graciela Sosa y Silvino Báez, los padres de Fernando, estarán junto a los abogados Fernando Burlando y Fabián Améndola, quienes los representarán como en calidad de particular damnificado.
En la primera audiencia está previsto que los fiscales Juan Manuel Dávila y Gustavo García presenten ante los jueces María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lázzari los lineamientos de la acusación contra los ocho rugbiers imputados por el delito de “homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas” y “lesiones leves”.
Finalizada esta instancia, los únicos dos testimonios previstos para la primera jornada serán los de los padres de Fernando, quienes llegaron a Dolores ayer a la tarde.